Todos hemos pasado a trabajar desde casa, por lo que nuestra rutina diaria ha sido sustituida por el trabajo en la oficina por “salas” en videollamadas. El trabajo desde casa requiere mucha atención: cada equipo tiene una conversación cada mañana, en la que establecen objetivos, y cada noche una conversación en la que comparan sus actividades diarias. Al mismo tiempo, no hay vuelos, y para nosotros, como empresa con la mayoría de sus clientes en el extranjero, el significado es que todas las reuniones con los clientes se han convertido en reuniones en línea y de hecho veo que los vendedores, a pesar de la situación, logran aumentar las reuniones virtuales.
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